Yo estaba todavía con tratamiento médico y tenía que ir periódicamente a
Barcelona a visitarme. Procuraba hacer la visita los martes, para poder ir a ver a mis amigos en la Cova del Drac. Un día, expliqué a unos de los responsables de esta Agrupación Poética, mi amistad con los de la revista Quatre Cantons y me pidió que les propusiera hacer un festival en el pueblo con la actuación del grupo Poesía Viva. Les dije que lo intentaría, a pesar de que veía difícil que les interesase.
En la primera reunión se lo planteé; les pareció bien, pero me dijeron que fuera a ver al alcalde, pues era él, quien tenía que autorizarlo. El mismo día fui a visitarle. Este me puso mil inconvenientes para que desistiese, por último para quitarme de encima me dijo: En septiembre volveremos a hablar, ya que en estos momentos tenemos mucho trabajo con los turistas.
En septiembre volví a insistir y decidió hacerlo, a pesar de que creía que un festival poético en aquel pueblo de pescadores no tendría éxito.
El 26 del mismo mes se celebró. Todo marchaba bien hasta el último día que nos teníamos que reunir a las diez de la noche para ver si todo marchaba conforme a lo acordado.
A las diez estaba yo en el punto de encuentro y nadie se presentó. Me disgusté, me puse muy nerviosa, pensando que a las doce de la mañana del día siguiente, tendría el grupo allí y no sabría que decir delante de la irresponsabilidad de aquella gente. Intenté localizarlos por teléfono, solo encontré a uno; el recibió sin culpa todo lo que sentía en aquellos momentos.
A las ocho de la mañana estaba a casa el concejal de Cultura y junto con el fuimos a la sala, Salvo las sillas que estaban plegadas no había nada de lo que habíamos acordado. Junto con el regidor colocamos las sillas y en pocos momentos se presentaron todos.
Cuando entró el Sr. Arbós con la pierna enyesada, el cual recibió la bronca de la noche anterior, fui seguidamente a pedirles disculpas ya que al encontrarme sola estaba muy nerviosa. El lo entendió y le quitó importancia.
A las once de la mañana se presentaron con un autocar el grupo de Poesía Viva. La sala salvo el rotulo, que iba a todo lo ancho del escenario, se estaba terminando de pintar.
A las seis de la tarde, empezaba el festival, después de que el Alcalde diese la bienvenida al grupo de Poesía Viva. Yo abrí la fiesta con un poema que había dedicado hacia pocos días a los pescadores sobre pergamino y había regalado a la Cofradía de Pescadores.
Colaboraron en el festival, dos cantautores hijos del pueblo dieron un recital de sus canciones, terminaron unas poetisas, que obtuvieron un gran éxito.
Todo salió mejor de lo que esperábamos. El Ayuntamiento fue espléndido; pagó la comida de los participantes en un buen restaurante y regaló unas magnificas pinturas a las tres poesías más bonitas y unas placas de plata conmemorativas de la fiesta a los dos cantautores.
El Alcalde estaba contento; me felicitó diciéndome que jamás había visto en el pueblo una fiesta con tanta asistencia de gente.
Lo que no sabía el señor Alcalde, es que estuve todos los día en la lonja junto con mi amiga María, la cual me ayudó explicando a todos los pescadores que el festival era un homenaje a ellos, que todas las poesías estaban dedicadas a los hombres del mar y por tanto no podían faltar a su homenaje. Todos me prometieron que no faltarían y lo cumplieron. A Poesía Viva les puse una condición; todos los temas de las poesías debían de estar dedicadas a los hombres del mar y así lo cumplieron.
En parte eso fue el éxito de la fiesta.
La revista de aquel mes hizo un amplio artículo sobre la fiesta.
Un mes más tarde en la misma revista, salió un comentario infantil atacándome por mi comportamiento de aquella fatídica noche con el Sr. Arbós.
Al mes siguiente contesté:
Sr. Director;
Hablar de INDIOS Y ROSTROS PÁLIDOS es una expresión tan infantil que pienso que las personas que me conocen no dan credulidad a estas palabras.
No quiero negar que la noche del día 25 de setiembre, pensando que me habían dejado un poco abandonada, cosa que no era cierto, pero que en aquellos momentos no lo sabía; no solamente estaba nerviosa sino que me invadía una angustia que no podía con mi alma y dije palabras poco correctas a una persona que no se lo merecía, no obstante, al día siguiente hablé con él y le explique en la situación en que me encontraba en aquellos momentos pidiéndole disculpas. Me pareció que se hacía cargo y quitó importancia.
Por lo que veo no fue así, por lo tanto Sr. Arbós, desde está revista le reitero me perdone mi comportamiento y si además sin saber he ofendido a alguna persona más le pido disculpas ya que no era esta mi intención.
Evidentemente los hechos no se pueden retroceder, pero sí tenemos conciencia de que hemos obrado mal y sabemos rectificar, es una virtud que nos ayudará a no volverlo repetir.
Mi nerviosismo solamente estaba promovido por causa de la ansiedad que sentía para que el festival fuese digno y brillante como el pueblo de L’Ametlla se merecía.
Fue un homenaje a los hombres del mar; siento admiración por esos hombres que una noche me impresionaron y emocionaron al oír hablar con tanto fervor de su Virgen. Aquella misma noche escribí un poema “ GOIGS A LA VERGE DELA CANDELERA.
Pienso que la persona que me ha dirigido su escrito, cuando sepa el valor de la palabra SENTIDO DE LA RESPOSIBILIADD , verá su error al comparar su comentario con el mío.
Amigos Caleros, el objetivo de nuestro festival se logró plenamente, un éxito
Rotundo como jamás se había visto en la Cala
Gracias a todos los colaboradores y gracias también de todo corazón, al pueblo por su asistencia ya que es el alma para que este festival tenga continuidad
Como siempre un afectuoso saludo a todos.
Mireia
Por motivo del casamiento de mi hija Ana, El cinco de octubre dejé el pueblo de L’ Ametlla de Mar, un pueblo que reitero, siempre recordaré con afecto; en él, encontré tranquilidad y paz de espíritu, que en aquellos momentos tanto necesitaba.
En abril del 81 nació mi tercero nieto Xavier, hijo de nuestro José.
El 10 de octubre se casó nuestra hija Ana, celebrándose la boda en Zaragoza en la iglesia de la Virgen del Pilar junto con la familia más íntima.
Al año siguiente tuve una agradable sorpresa; la gente de L’ Ametlla de Mar aún me recordaba. El concejal de Cultura me envió el programa de la Fiesta Mayor donde en la parte central había fotografías de mis dos poemas, uno dedicado a la Virgen de la Candelaria que había regalado al cura del pueblo y otro a la Cofradía dedicada a los pescadores.
Unos meses más tarde compramos una caravana, y durante dos años pasamos más tiempo en Campings que en nuestra casa.
En agosto del año 82 nació el cuarto nieto, hijo de nuestra hija Ana.
En el año 84 el estado de salud de mi marido se agravó de tal forma que tuvo que ser intervenido quirúrgicamente, poniéndole dos baipases; después de una larga convalecencia se recuperó. A pesar que todo fue muy bien, el cardiólogo le advirtió que no pensara en trabajar y que llevara una vida tranquila si quería que el trabajo que le habían hecho le durase unos cuantos años..
En el año 85, vendimos el piso de Barcelona y recorrimos todo el Maresme, pueblo por pueblo durante medio año, quedándonos definitivamente en Villassar de Mar, El pueblo más bonito del Maresme; Mar… Flores…Montañas… El cultivo de flores y plantas. es la principal fuente de riqueza del municipio .
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